viernes, 21 de mayo de 2010

La "larguísima" Marcha de los PPOO

Les presento dos de los poquisimos articulos aparecidos en la prensa nacional sobre la Marcha de los PPOO, les pido que los lean detenidamente (si ya no lo han hecho) y los espero al pie del post para algunos comentarios y reflexiones:



La plaza de los pueblos originarios

Los reclamos principales fueron por tierras y el rechazo a industrias extractivas. Fueron recibidos por CFK.


Por Darío Aranda, Pagina/12

Nunca en doscientos años los pueblos indígenas habían llegado con tanta masividad hasta el centro del poder político de Argentina. Y el reclamo, unívoco y contundente, fue el mismo de los últimos dos siglos: tierra, rechazo a las empresas que los desalojan, respeto a su cultura ancestral y justicia frente a los atropellos del pasado y el presente. “La tierra, robada, será recuperada”, fue el canto con el que las comunidades indígenas de diez provincias ingresaron ayer a la tarde a Plaza de Mayo. Todos los discursos denunciaron el rol extractivo y contaminante de las compañías mineras, agropecuarias y petroleras, y también a la dirigencia política “que por acción u omisión permite nuestra opresión”. Aclararon que no marcharon para festejar el Bicentenario, sino para “mostrar que seguimos vivos”. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner los recibió en la Casa de Gobierno y prometió atender sus reclamos. Luego de ocho días de marcha, Jorge Nahuel, de la Confederación Mapuche de Neuquén, aseguró que esperaban “anuncios concretos a las históricas demandas”.

La movilización fue impulsada por la Confederación Mapuche de Neuquén, la Unión de los Pueblos de la Nación Diaguita (UPND de Tucumán), Kollamarka de Salta y el Consejo de Autoridades Indígenas de Formosa. También participó el Movimiento Campesino de Santiago del Estero (Mocase-Vía Campesina) y contó con el apoyo fundamental de la organización Tupac Amaru, que dirige la jujeña Milagro Sala.

“Es una marcha histórica, nos animamos a llegar hasta este mundo de edificios, asfalto, y venimos con respeto pero también fuerza, queremos que les quede claro que los grandes negocios de las empresas arrasan nuestras tierras y se llevan nuestra vida”, graficó al comienzo de la marcha Félix Díaz, pilagá de la comunidad La Primavera de Formosa, uno de los ocho mil indígenas que llegaron hasta Buenos Aires.

Las columnas de comunidades indígenas ocuparon siete cuadras de la avenida 9 de Julio. Lo ancho de todo un carril estaba desbordado de rostros curtidos, abuelos, muchas mujeres, niños y gran cantidad de jóvenes. En Diagonal Norte los esperaron organizaciones sociales, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora y la Central de Trabajadores Argentinos (CTA). Camino hacia la Plaza, desde algunos edificios tiraban papelitos, aplaudían el paso indígena y las banderas argentinas convivían con las wiphala, emblema multicolor de los pueblos originarios.

“Caminando por la verdad, hacia un Estado plurinacional”, fue la consigna de la marcha, que comenzó el 12 de mayo en Jujuy, Misiones y Neuquén, atravesó diez provincias y contó con la presencia de los pueblos kolla, mapuche, qom-toba, diaguita, lule, huarpe, wichí, mocoví, guaraní, vilela, sanavirones y guaycurú. Elías Maripan, de la Confederación Mapuche de Neuquén (CMN), arengó desde el escenario. “Los pueblos originarios están de pie, dignos y conscientes de sus derechos”, gritó con el puño en alto. La multitud lo ovacionó.

Desde el ingreso de las columnas a la ciudad de Buenos se hizo hincapié en el pliego consensuado antes de comenzar la marcha. Territorio, cultura-educación, “madre naturaleza” y reparación económica. En base a leyes ya vigentes, exigen inmediato reconocimiento y restitución de tierras, aplicar con urgencia el derecho a la consulta y consentimiento sobre los hechos y acciones que los afectan, y la aplicación efectiva de la ley 26.160, de emergencia territorial, ya vigente hace cuatro años y muy demorada en su aplicación.

En el plano cultural solicitaron reconocimiento de las lenguas indígenas como idiomas oficiales, incluir planes de estudio interculturales, crear universidades e institutos de formación indígena y suplantar el 12 de octubre por fechas significativas de los pueblos originarios. “Solicitamos la derogación del Código de Minería”, remarcan desde la convocatoria –como freno a la avanzada de la minería metalífera a gran escala– e impulsan la creación de un “tribunal de justicia climática”.

David Sarapura, de la Coordinadora de Organizaciones Kollas Autónomas (Kollamarka, de Salta), aclaró que la marcha “no es para festejar el Bicentenario, marchamos para demostrar que estamos vivos, que somos los antiguos pobladores de esta tierra y que hemos resistido y seguiremos resistiendo, eso es lo que nos llevó a todos los hermanos a estar en esta marcha. Lo que sí festejamos es que estamos vivos”.

La Presidenta recibió a una treintena de delegados durante una hora. “Propuso una agenda de trabajo para la primera quincena de junio. Dijo que está de acuerdo en muchos puntos, y en otros para nada. Suponemos que no comparte nuestro rechazo a la minería, las petroleras y empresas que saquean y contaminan nuestros territorios, no lo dijo pero lo dio a entender”, explicó Jorge Nahuel, de la Confederación Mapuche, y reconoció que esperan “anuncios concretos. Nos hubiera gustado respuestas claras a nuestras demandas, pero sabemos que al Estado les cuesta entender nuestra realidad, aunque tiene claro que estamos organizados y no bajaremos las demandas”. El derecho y la protección del territorio es la histórica demanda de todos los pueblos indígenas, sin distinción de etnias y regiones.

Una investigación de Página/12 reveló en 2007 que existen al menos 8,6 millones de hectáreas en conflicto entre comunidades indígenas y multinacionales mineras, los estados provinciales y nacional, privados multimillonarios –aunque también algunos menos acaudalados–, empresarios turísticos, plantas de celulosa, empresas sojeras, universidades nacionales y, según acotan las comunidades, “un sistema político y judicial que desobedece las leyes”. En la misma línea, un trabajo de la organización Red Agroforestal Chaco Argentina (Redaf) relevó seis provincias del noreste argentino y aportó datos inéditos: cinco millones de hectáreas en conflicto, casi 600 mil personas afectadas, y confirma que el sector privado y estatal son los principales opositores a los campesinos e indígenas. El informe demuestra que la mayor conflictividad comenzó en la década del 90, de la mano del avance de la soja sobre el norte del país.

Jorge Nahuel, mapuche, aseguró que ahora los pueblos indígenas están “movilizados, se hacen escuchar y tienen una fortaleza mayor que hace décadas”.


******************************************************************************

Derecho a la tierra


Por Martin Pique, Pagina/12

“Todavía estamos vivos. No nos han terminado de matar.” La frase de Josefina Vargas, miembro de una comunidad mapuche de Neuquén, resonó en el Salón de las Mujeres del Bicentenario de la Casa Rosada como un cuchillo que corta el silencio. Sentada a muy pocos metros la observaba con gesto concentrado la presidenta Cristina Fernández. “Son doscientos años, pero yo no puedo decir que estoy festejando”, advirtió Josefina mientras las pantallas gigantes del salón reproducían su imagen con el poncho y la vincha de plata y cuero llamada trarülonko en su idioma original. En el estrado la escuchaban CFK, la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, y el ministro de Educación, Alberto Sileoni. El acto había sido organizado con motivo de la llegada a Buenos Aires de varias delegaciones de pueblos originarios de distintos puntos del país. “Me gustó mucho que ustedes dijeran que se sienten argentinos”, comenzó su discurso CFK.
En el acto se anunció la firma de los decretos 700/2010 y 701/2010, que establecen las nuevas atribuciones del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) y crean una comisión en la que estarán representados la Nación, gobiernos provinciales y los pueblos originarios para analizar el reclamo más sensible del sector: la tenencia de la tierra. Antes de que comenzaran los discursos, se rumoreaba que el Gobierno podría llegar a anunciar una decisión fuerte para los indígenas, como la declaración de Estado plurinacional o un pedido de perdón en nombre del Estado por los crímenes cometidos por las fuerzas estatales desde la creación de la Argentina. Eso no sucedió. La medida más aplaudida fue la creación de la Comisión de Análisis e Instrumentación de la Propiedad Comunitaria Indígena, ente descentralizado de Desarrollo Social que deberá encargarse de garantizar el derecho constitucional a que las tierras en las que viven los pueblos originarios sean reconocidas como propiedad comunitaria.
La locutora oficial también anunció que el Estado financiará la construcción y el equipamiento de diez radios FM y una radio AM para las comunidades de pueblos originarios. Otro beneficio que se anunció desde el micrófono fue la ampliación a 20 mil de las becas de estudio para educación primaria y secundaria y el ofrecimiento desde el Ministerio de Educación de becar a todo joven egresado del secundario que pertenezca a una comunidad indígena para que pueda cursar estudios universitarios. “Me gusta que cosas que nunca pasaron en la Argentina comiencen a hacerse realidad”, dijo la Presidenta con una sonrisa. Se refería a que habían pasado 65 años sin que un jefe de Estado recibiera en la Casa Rosada a miembros de las comunidades indígenas. Poco antes, CFK había escuchado elogios, pero también reclamos.
“Usted debe reconocer nuestros derechos. Somos las naciones preexistentes. Queremos que se empiecen a estudiar las lenguas de nuestras naciones”, había pedido Flora Elsa Cruz, guaraní. “¡No nos han extinguido!”, festejó María Luis Pereyra, de la comunidad tonocoté, lo que desencadenó un grito colectivo acompañado de sonidos musicales.
Fueron algunos de los rostros que ayer visitaron la Casa Rosada, la misma que ordenó construir Julio Argentino Roca, recordado impulsor de la Campaña del Desierto, cara visible de los billetes de cien pesos.

***************************************************************************

Mas allá de la visible buena intención de los dos articulos, me fue difícil encontrar mas menciones en otros diarios. Ambos reflejan la dolorosa realidad con la que los ilusionados integrantes de los PPOO fueron a entrevistarse con la máxima autoridad democrática de nuestro (el de ellos?) país.
En la marcha en Rosario les escuché decir: no nos podemos volver a nuestras comunidades con las manos vacías!
La pregunta a los hermanos originarios es: y? se las llevan llenas de que?
Comisiones, estudios y promesas... poco para tanto esfuerzo.


Las autoridades democráticas y aún la prensa solidaria y "progre" siguen sin entender la realidad de los PPOO, en nuestro país y en toda América (a exepcion de Bolivia).
Siguen sin entender que para los PPOO no es "político" su accionar, es mucho mas profundo: se trata de la vida, del amor, de su madre "la Pachamama", de su padre "el Inti", de su cosmovisión.

Es mas, la presidenta Crsitina les dijo sin tapujos, que: con muchas de las cosas que piden... estoy de acuerdo. Y en otras... para nada!
Y esas del "para nada" son las mas importantes: el arrasamiento dela tierra, la contaminacion de las aguas y glaciares; por los negocios "blancos" (que el poder democrático impulsa en aras del "desarrollo nacional"!) por la agroindustria sojera y maicera, por la megamineria a cielo abierto, por las pasteras en los ríos, por el robo de tierras y la destruccion de los ecosistemas por el avance del "progreso" de las tierras cultivables.

Que podrán hacer las comisiones, los estudios y los planes para marginados del Ministerio de Desarrollo Social dela Nacion?
Se cumplirán las promesas?

En lo personal, tengo la certeza que la Marcha ha sido utilizada para el "folklore politico" del Bicentenario, por una sociedad, un gobierno y una prensa que considera a los PPOO como mera "masa de maniobra", y que ésta quedará ahí nomás. Es evidentemente muy justo lo que reclaman, pero es "un problema menor"


Los ancestros iluminados, las y los caciques, los chamanes, las y los ancianos sabios y el pueblo de cada Nación Preexistente, sabrán extraer con su inmensa sabiduría los aprendizajes de esta extraordinaria marcha y mobilización para ver como se continúa gestando el renacer de las culturas de la Pachamama, de la Mapu.

In laa ke ch

Jallalla!

Paz, luz,armonía, sabiduría, memoria, esperanza y amor!

mandrake

No hay comentarios.: