viernes, 10 de abril de 2009

Agila Blanca

No temáis, voy a seguir con el relato del último post, porque es mi "cosmovisión", que no sé si es muy importante, pero es la mía y se las quiero ofrecer.

Quería dejarles para éste día, post pascuas cristianas, post feriado largo en casi todo el mundo, la impronta de un miembro de los Pueblos Originarios de nuestra América.
Voy a iniciar un especie de saga (como la de los Anunnakis y Ramtha) con posts sobre las maravillosas enseñanzas de los Pueblos Originarios de nuestro continente ( se llamará América en serio?), y ella será absolutamente sin ningun tipo de frontera o prejuicio.
Creo que éstas enseñanzas, o reflexiones si prefieren, nos van a enriquecer a todos.
Pues nuestros Pueblos Originarios, lejos de ser los indios de mierda, hambrientos, pobres, ignorantes y marginales, que el sistema nos quiere vender desde hace 517 años.
Son en realidad la sabiduría de la Tierra, de la Mapu, de la Pachita

Y no crean que entrar y encontrar las informaciones sobres sus culturas en el pasado y aun ahora en el presente, sin el contenido discriminatorio de la mirada occidental, blanca y eurocentrista, no es una tarea fácil!


Aguila Blanca, es un ser que vivió en éste plano de realidad hace ya muchos años, pero que sigue vivo y regalándonos su enseñanzas.
El llegó a iluminarse, ascendió y se preocupa por nuestra evolución espiritual.
Como todo buen Guerrero Espiritual.
Les dejo ésto, breve, pero sabroso relato, como aquello con que mas les guste deleitarse:


Los indios norteamericanos pertenecen a una civilización antigua, y su concepción del mundo en aquel tiempo difería mucho de lo moderno.
Yo les enseñaba a percibir el mundo como un Organismo Entero.
Yo inculcaba a las personas el respeto a cada forma de vida y les enseñaba a vivir y actuar impecablemente en la Tierra, sin violar la armonía, el equilibrio y la belleza de lo que les rodeaba.

Desde la niñez temprana un indio aprendía a escuchar y comprender el mundo circundante: el sol, las estrellas, el viento, el bosque, el río, los animales…
Él aprendía a vivir siguiendo las leyes de la naturaleza y comprendía que la violación de éstas causaba dolor innecesario a lo viviente”.

“¡Era fácil enseñar a los indios! Pues ellos, a diferencia de los europeos modernos, no fueron encarcelados en las “cadenas” de sus casas de piedra, en las “corazas” de sus ideas sobre la estructura del mundo. Los indios se sentían como parte íntegra de la naturaleza; su casa eran los bosques infinitos, las montañas rocosas, los lagos azules y las cascadas.
¡El estado de unión con la naturaleza era muy natural para ellos!”

“Cruzando un río en una piragua, caminando por senderos montañosos y boscosos, un indio se sentía uno con el viento, el agua, las montañas y los pájaros… Desde la niñez él sabía que su cuerpo es nada más que un fragmento pequeño en el mundo de la materia, que no es más importante que los pinos que susurran con sus copas, que el viento que lleva las nubes, o que las ardillas que retozan en los árboles o los peces que nadan en las aguas…”


—Me gusta el nombre Eagle. Eagle significa Águila. Y águila tiene mucha importancia para un indio.
»¡El águila sabe lo que es libertad! ¡El águila sabe lo que es vuelo! ¡El águila vive allí donde hay sólo el viento, el sol, las montañas, los precipicios insondables y la libertad!
»¡El águila nace libre y muere libre! ¡Nace para volar, para vivir planeando sobre las montañas! ¡Uniendo sus alas con el viento, el águila está conociendo este poder que permite planear!

»Y cuando la muerte llega, el águila de antemano sabe el tiempo de su llegada. Y sube por última vez al cielo y quita allí su cuerpo que no necesita más; ¡y sigue viviendo en el espíritu, planeando allí donde el sol ascendente ilumina las cimas de las montañas!

»¡Me gusta el nombre “Águila”! ¡El Guerrero del Espíritu es similar a un águila! ¡Él nace para vivir y morir siendo libre! Él vive uniendo las Alas del Espíritu con el Poder del Creador y aprende a planear sobre el mundo de la materia, siendo guiado y sostenido por el Poder. Él planea en la corriente de la Eternidad, y el Poder de Dios se manifiesta a través de su cuerpo. ¡Él se desliza en la Eternidad e Infinidad de la vida, sin ser ligado por algo, salvo por el Amor que le une con el Poder!

»El Guerrero del Espíritu sabe la hora de su muerte y sale al encuentro con su Libertad dejando la envoltura innecesaria de su cuerpo antes de que éste muriera debido a otras razones.
»¡Pero el Guerrero del Espíritu puede lograr aún más: uniendo el Poder con el cuerpo, él puede convertir la materia en el Espíritu, encendiendo el Fuego desde adentro!

Mandrake 952

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