sábado, 27 de junio de 2009

La vida en Technicolor

Luego que volvíera de mi logrado/fracasado ingreso a la Escuela Naval Militar, estuve casi un año (de abril a diciembre de 1970) alpedeando.

No tenía nada claro, no sabía si quería seguir estudiando, no sabía que estudiar, no sabía nada de nada.
Simplemente, como en otros momentos de mi vida, dejé que el transcurso de los dias (el tiempo?) fuera decurriendo, transcurriendo y me arrastrara suave y agradablemente como hacen los grandes rios como el Paraná.
Es como si uno paseara por la vida, flotando, siendo llevado por una corriente poderosa que nos transporta hacia algún lado... pero que no sabemos cual es!
(años después tuve la misma sensación sobre la "locura", pero de eso tal vez no les hable nunca mas que ahora)

Divagué entre el campo y la ciudad, trabajé en un taller de pintura de autos de un gran amigo, pinté casas con mi hermano, trabajé en un taller mecánico, leí mucho y canté en el Coro de la que fuera mi escuela... la Dante Alighieri de Rosario.
De jardín de infantes a 5° año nacional!
El Coro era un delicios ámbito dirigido por una gran persona y un extraodrinario músico y artista, ser humano de enorme calidad y calidez, el profesor Daniel Rivera (padre), allí y desde los 13 años educamos y calibramos nuestras juveniles voces de sopranos, contraltos, tenores y bajos en obras clásicas, del folklore italiano y argentino, y lograbamos un "ensamble" bastante notable y hasta reconocido en festivales de Coros de los cuales participamos con entusiasmo.
Además era un lugar ideal para conocer chicas, ir a fiestas y pasar hooooras ensayando o preparando algun recital.

Esa escuela, en esa época no era "cheta" era la escuela de los hijos de los inmigrantes italianos con buen trabajo... c est tout!
La mayoría de mis compañeros eran hijos de laburantes, alguno que otro de profesionales y otros (yo) de un muerto ilustre y de una mama empobrecida.
Fui becado los 12 años de escolaridad!
Buen alumno? Hummmmmmm
De entrda me propuse nunca estar entre los 5 primeros, para no ser un lameculos de nadie. Y encabecé con altos y bajos el segundo pelotón de aquellos que pudiendo dar mas... se conformaba con poca cosa.
La escuela fue para mi un lugar delicioso y divertido, al cual disfrutaba ir, donde me sentía en mi casa, todos me conocían y me querían. Era un joven bastante popular, aunque... un tanto engreído. Nunca quería faltar a clases, y cuando me iba a pasear con los amigos (de "rabona") mi madre siempre estaba avisada de que en vez de estar en la escuela... andabamos por ahi, jugando a vivir y ser jóvenes. Ella lo entendía perfectamente.

Decía pues, que recien por agosto o septiembre decidí que a falta de mejores opciones (en realidad no veía ninguna) iba a hacer el ingreso en Medicina.
Era un curso "preuniversitario" impuesto por la dictadura de Onganía para restringir el ingreso a las universidades (cosa que luego, los gobiernos democráticos convalidaron en el 84 con los dirigentes estudiantiles a la cabeza, como algo "natural" y que aun perdura...)
El curso comenzó en diciembre del año 70 y duraría hasta febrero, en que de 1200 inscriptos... con suerte quedaría unos 250 o 300 estudiantes.
Yo venia de entrar n° 48 de 1200 en la Escuela Naval, asique me sentí absolutamente respaldado por mis conocimientos para aprobar ese curso autoritario y dictatorial.
Mis capcidades intelectuales deslumbraban a todos los que me conocían... menos a mi.
Yo, ya sabía, que la inteligencia... era otra cosa, que no superar escollos impuestos arbitrariamente por el poder de turno.

En esos tres meses, mi vida cambió DRAMÁTICAMENTE, fue como si alguien hubiera conectado una energía poderosa que me transportaría casi en forma inmediata y con muy poca preparación, al liderazgo de mis compañeros de "pre universitario".
Fue un "de la nada, al todo" así, en no mas de dos semanas era delegado de mi comisión, miembro del cuerpo de delegados del pre de Medicina, miembro de la coordinadora regional de estudiantes del pre de la universidad de Rosario.
Y a partir de ahí mi vida fue una sucesion de acontecimientos imparables que me catapultaron a la militancia política desde el 70 y hasta... hasta... hasta... hoy? (caramba!)

En esa época acuñe una frase que repetí muchas veces: mi vida era en blanco y negro... y a partir de ahí fue en technicolor!

Y evidentemente debo haber estado dotado de alguna cosa en especial, pues con solo 18 años me transformé en un lider de masas.
Como si un dios, en un plano cualquiera de la existencia, hubiera chasqueado los dedos y zas! ahi hubiera aparecido... un nuevo lider!

Obvio es que el pre univesitario fue tomado, por las agrupaciones estudiantiles y partidos políticos, como un test regional (Rosario) y nacional para quebrar la política universitaria de la dictadura ya en franco declinio luego del Cordobazo.
Exigíamos el "INGRESO IRRESTRICTO", NO A LA LIMITACION en el INGRESO, y AUMENTO DEL PRESUPUESTO EDUCATIVO, entre taaaantas otras cosas.
Hicimos asambleas, huelgas, "tomas de facultad", mobilizaciones, marchas y concentraciones.
Las agrupaciones estudiantiles, sus lideres, estaban sorprendidos de nuestra capacidad de organizacion y combate, muy superior a la de los alumnos mas avanzados.
Nos enfrentamos con la policía, con las autoridades de la facultad y de la universidad, fuimos reprimidos, golpeados, estuvimos presos algunas noches. Tuvimos ocupada la facultad por casi 2 meses, durmiendo ahí, de reunión en reunión, de asamblea en asamblea, resistiendo los intentos de las fuerzas policiales para desocuparla... hastaaaa, hasta que terminamos negociando... levantar la toma, rendir los exámenes finales... pero que no hubiera reprobados!!
El exito fue total! Ingresamos los 1200!
Y este pobre mago, novel politico bisoño, con algunos otros lideres espontáneos, encabezamos el ingreso mas masivo que se recuerde en la facultad de Medicina de Rosario y por la PUERTA GRANDE de la defensa de nuestros derechos y la lucha democrática!

Y a mi, que me seguían llegando los telegramas de la Escuela Naval... para reincorporarme en el mes de febrero...

Que cosa la vida, mis amigas/os!
Que cambio tan abrupto!
Como debatieran Enki y Enlil en la saga de los anunnakis luego de la Expedicion Terra (ver esos posts): hado o destino?
Estaba yo predestinado a cumplir ese rol?
Era necesario para mi evolucion personal y espiritual?
Fue una decision azarosa de mi parte?
Fue producto de la formacion de mi madre y su familia "librepensadora"?
Fue producto de los hechos políticos que cambiaban nuestro país día a día?

Tal vez, hado y destino, a veces se mezclen en sutiles proporciones y tejan una madeja inextricable, de la cual hacemos parte cual una fibra mas y que nos enreda en un torbellino de hechos y de acciones que nos lanza a otra dimensión en nuestras vidas.
Esa fue mi historia... en 7 meses de cadete militar de una de las marinas mas conservadoras de latino america, a lider subversivo del "pre" de medicina!

Paz, luz, armonía y amor!
I n lake ch

mandrake

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